Sus ojos son tiernos y juguetones me dan los buenos días y me atrapan con dulzura.
No sabia cuanto necesitaba de mimos, de lamidas y arañazos hasta que llegaste a casa.
Rojo así te llamo o Gorri en euzkera mi cachorro, mi compañero de broncas y juegos en el jardín.
Y es que volver a casa desde que me esperas ya no es igual, mis entradas a la puerta son geniales. Metes tus patitas entre mis zapatos y mueves la cola como un pececito. YO SOLO SONRIÓ
Rojo busca calor en mis costillas y desde que llego mi sofá es mas calentito, me gusta dar abrazos soy una versión en bajo resolución de mi misma de hace un par de años, pero no importa aun abrazo.
Todos deberíamos adoptar a un perrito, por una taza de comida y de agua, recibo ha cambio un cariño incondicional y una grata compañía. Ademas cuando hablo sola en casa el viene tras de mi como preguntándome con sus ojos ¿que digo?...le miro y YO SOLO SONRIÓ
Les cuento un poco la historia Gorri, vivía en la jaula de un caserío nos hizo mucha ilusión que no los regalaran pues estábamos buscando un perro. sin importa su raza ni tamaño. Y este cachorrin de 10 semanas buscaba una casa calentita para pasar el frió inviernos. Y AHORA ESTAMOS AQUÍ TODOS TAN AGUSTOS.
Nosotros (mi pareja y yo) estábamos intentando adoptar por medio de
APA SOS BILBAO http://www.sosbilbao.org/ fuimos un par de veces pero cuando nos decidimos por una pastora alemana ya no estaba.
Bueno y fue en ese momento donde apareció Gorri. Ahora pensamos tener otro perro mas adelante o apadrinar perritos para traerles a casa y cuidarlos. por medio de esta asociación que hace una estupenda labor.
No quiero venderles la moto de que todo es estupendo, un perro requiere mucha paciencia, y educarles es muy difícil (rojo es tozudo y cabeza dura) pero poco a poco se va educando, bueno sin mas que contaros les deje arriba el link de la protectora y seguro en vuestras ciudades habrán otras, y si estan pensando en tener un perrito pueden plantearse también la adopción como una alternativa, por que hay muchos perritos abandonados, o en jaulas esperando encontrar un dueño o familia que les quieran.