domingo, 9 de diciembre de 2012

La magia de tenerlo todo

Siendo sincera aveces me gustaría quedarme en este lugar.

Con lo básico se es feliz, aunque traje maletas llenas de cosa solo he necesitado 3 mudas de ropa y dos trajes de baño. 
Todos los días me despierto a las seis de la mañana con un sol radiante, los días pasan mas despacio no se si es el calor, o que aquí sale el sol antes.

Me voy al centro, a la playa, a hacer recados y cualquier esquina es buena para hacer una parada y comprar en una carretilla agua de coco frió para la sed, me detengo en un chiringuito donde vendan zumos (mango-piña-maracuya o passion fruit-zapote-níspero-lulo-platano-naranja-etc) Me detengo en los puesto del centro a ver la mercancía que venden la moda de la gente popular, los colores de las carretillas, Santa marta esta llena de luces de navidad y moto taxis.

Ayer me senté bajo de un árbol frente al mar mientras pensaba que era genial estar en mi pueblo
me percate que a mi lado había mucha gente extranjera y es que en los últimos años se han venido a vivir muchos europeos a la costa. compran casas grandes las restauran las vuelves hostales, restaurantes, discotecas, e incluso bares de tapas.

Y yo me pregunto en que momento decidiré regresar del todo, o si eso va a ocurrir, en que momento me gustaría. veo niños jugando con un balón improvisado con trapo a la orilla del mar, sonrió enternecida con la idea de que algún día mis hijos (si los tengo) vengan a pasar los veranos en estas playas, con estos contrastes tan interesantes, que tengan registrados desde niños algunos sabores, palabras, expresiones, mi cultura ...
Me gustaría también...  

Esta es mi tierra y cuando estoy aquí veo que estoy desacostumbrada a cosas como el ruido de las calles, la música alta en cada esquina, la calma (pasividad) de los caribeños que me ha costado tanto deshabituarme, altavoces por los barrios promocionando sus servicios, niños trabajando, este es un mundo... Mi mundo.











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